Phil Spencer, vicepresidente ejecutivo de gaming en Microsoft, sorprendió a todo el mundo el pasado lunes 24 de febrero al realizar una publicación que nadie esperaba en el blog de Microsoft.

Xbox Series X
En una publicación sorpresa, Microsoft anunció varias de las características técnicas más esperadas de la nueva consola de Microsoft esperada para finales de 2020. Según el ejecutivo de Microsoft, Xbox Series X tendrá una potencia de 12 teraflops, más de 8 veces la potencia de la Xbox One original y el doble que la nueva Xbox One X. El anuncio vendría a confirmar los primeros rumores acerca de la potencia de la consola. En los últimos meses hemos podido asistir a una guerra de filtraciones y rumores, los cuales sitúan en unas ocasiones a la futura consola de Sony, PlayStation 5 como la consola más potente de la próxima generación mientras que en otras es la Xbox One Series X de Microsoft la que ocupa el trono de la «potencia».
Teniendo en cuenta que las quinielas de Tflops han oscilado entre los 9 y 12 teraflops entre las 2 consolas, Sony ahora está obligada a anunciar unas especificaciones que igualen las de Microsoft u ocultarlas completamente. El pasado enero Sony ya celebró una extraña conferencia en el CES 2020 donde lo único que reveló fue el nombre de su próxima consola y el logo, algo que produjo la incredulidad de los asistentes. Es por ello que internet está repleta de rumores indicando que Sony podría estar en realidad teniendo dificultades en la fabricación de su nueva consola. Solo queda esperar para ver si alguno de estos rumores tiene fundamento o si Sony tiene una sorpresa guardada para un próximo anuncio de PlayStation 5.
Con la revelación de los datos de los teraflops, unidad que se utiliza para medir la potencia de la unidad gráfica (GPU) de una consola u ordenador, se confirma que la nueva consola de Microsoft apunta a ofrecer la máxima capacidad de procesamiento por un precio que se estima que podría rondar los 500 €. En otras palabras, significaría que Xbox podría ofrecer la misma potencia que un PC de 1000 € por la mitad de precio.
Spencer también indicó que la CPU de la máquina será 4 veces más potente que la Xbox One original. Este punto es más importante si cabe que el de la GPU dado que los procesadores Jaguar originales que montaban Xbox One y Sony PS4 tenían fama de ofrecer una capacidad de procesamiento muy pobre en relación con sus unidades gráficas por lo que muchos juegos se podían ver comprometidos en términos de frames por segundo o características como la inteligencia artificial de los juegos.
Este anuncio coloca a Sony en una situación que a priori parece comprometida dado que aún no han revelado verdaderos datos de la potencia de su consola ni el factor de forma que tendrá la máquina. Algunos rumores apuntan a que Sony podría estar teniendo problemas en la refrigeración de sus prototipos que impedirían a la máquina alcanzar su máxima capacidad de procesamiento. Microsoft podría haberse adelantado a esta problemática diseñando una consola con dimensiones poco frecuentes pero que ayudarían a que la consola no tuviera un handicap provocado por el tamaño de la carcasa.
El anuncio de Microsoft también volvió a citar el almacenamiento de estado sólido NVMe SSD y soporte para 120 FPS. Mencionó una característica nueva patentada por Microsoft llamada Variable Rate Shading que permitirá a los programadores priorizar elementos específicos de un juego como objetos o personajes concretos. Podrán así optimizar mejor el videojuego para conseguir tasas de FPS y resoluciones más altas con una mayor estabilidad.
Spencer habló de la característica «Quick resume for multiple games» que permitirá pausar y retomar los videojuegos al instante, característica que será posible gracias a su nuevo sistema de almacenamiento ssd.
La nueva máquina de Microsoft también confirma soporte de aceleración por hardware para Raytracing mediante DirectX, una característica con la que se ha especulado bastante en los últimos tiempos pero sobre el cual no había nada confirmado.
Por último, la mejor noticia estuvo en la anunciada retro compatibilidad que ofrecerá Xbox Series X con todas las consolas Xbox originales. Xbox One será soportado al completo mientras que Xbox 360 y la Xbox original serán soportados mediante el programa de retro compatibilidad que introdujo Microsoft con la Xbox One.