Samsung ha anunciado oficialmente el Galaxy S25 Edge, su nuevo buque insignia que promete marcar un antes y un después en el diseño de smartphones. Con un grosor de apenas 5,8 milímetros, se posiciona como el teléfono más delgado del mercado, sin sacrificar potencia ni funcionalidad.
El Galaxy S25 Edge cuenta con una pantalla AMOLED de 6,8 pulgadas, resolución QHD+ y una tasa de refresco de 144 Hz, ofreciendo una experiencia visual inigualable. En su interior, alberga el procesador Exynos 2500, acompañado de 12 GB de RAM y opciones de almacenamiento de hasta 1 TB.
En cuanto a la fotografía, incorpora un sistema de triple cámara trasera con un sensor principal de 200 MP, un ultra gran angular de 12 MP y un teleobjetivo de 10 MP con zoom óptico 5x. La cámara frontal es de 40 MP, ideal para selfies de alta calidad y videollamadas.
La batería de 4.500 mAh soporta carga rápida de 65W e inalámbrica de 30W, garantizando una autonomía prolongada y tiempos de carga reducidos. Además, el dispositivo es resistente al agua y al polvo con certificación IP68.
El Galaxy S25 Edge estará disponible en colores negro, plata y azul zafiro, con un precio base de 1.199 euros. Su lanzamiento global está previsto para finales de mayo de 2025.
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