La evolución de los televisores sigue sorprendiendo. El sector se encuentra en pleno desarrollo y promete interesantes novedades en breve. Las cuales comentaremos en los siguientes apartados.
El poder de la tecnología
Si las pantallas 4K supusieron un paso de gigante en lo que respecta a calidad de imagen, las 8K han logrado superar todos los límites. Constan de 7680 píxeles horizontales y 4320 verticales para manejar hasta 33 000 000 de píxeles.
Además, doblan la nitidez de los 4K, mejoran las de los UHD 4K y son 16 veces más potentes que los Ultra HD. Sin embargo, los avances de la industria parecen apuntar a una evolución todavía mayor relacionada con la tecnología interna de las pantallas.
Un futuro cada vez más cercano
Si la tecnología LED fue esencial para ganar en luminosidad, otras variantes como las pantallas mini LED contribuyen a la sostenibilidad y al ahorro energético. Los modelos más competitivos apostarán por:
- QLED y NEO QLED. Usa puntos cuánticos y pueden activar los puntos de luz de forma individual. El contraste de colores es mucho más intenso lo que aporta un realismo inédito. Su generalización es cuestión de tiempo.
- OLED. Gracias a un diodo emisor de luz orgánico, se consigue individualizar el encendido de cada píxel. Progresivamente, se espera que los fabricantes usen esta tecnología en los modelos de todas las gamas.
- Mini LED y Micro LED. Ambas se basan en el uso de LEDs con un grosor de 0,2 milímetros. La posibilidad de iluminarlos de manera independiente aumenta la profundidad de los colores y convence al televidente con facilidad.
Asimismo, los diseños que vendrán evitarán la clásica pantalla con demasiado grosor. Ya se está trabajando en prototipos con un ancho de menos de 10 centímetros lo que permite considerar el producto casi como un elemento decorativo más.
Las pantallas inteligentes
Son las que confirmarán la importancia de entender que un televisor sirve para mucho más que para ver la televisión. La inclusión de la Inteligencia Artificial en sus sistemas operativos mejora la experiencia del usuario logrando que sea más inmersiva.
Usar el micrófono del mando a distancia para seleccionar un programa o función es un servicio digno de mencionar. Pero también la compatibilidad del televisor con los asistentes de voz más habituales e incluso su posible uso como panel de control de la domótica instalada en el hogar.
Unas opciones más sostenibles
Los nuevos modelos serán de clase energética A o superior. Los intentos por crear un televisor de alta gama que funcione correctamente conectado a la energía solar han sido fructuosos. El tamaño de la pantalla ha ido creciendo y es bastante probable que se consigan alternativas totalmente ecológicas con alta resolución.
Así, los televisores del futuro se están fabricando ya y solo queda que su precio se equilibre dependiendo de la demanda. Sus características permiten pensar que las nuevas referencias lo tienen todo para generar sensaciones distintas y propiciar usos alternativos. Todo sea por disfrutar de la tecnología más avanzada en el salón de casa.